José Zabala
New York- La joven dominicana Yisbell Marrero, graduada en ciencias políticas invito a todos los sectores de la comunidad a marchar en favor de ley Roe vs Wade de 1973 ante la amenaza del borrador redactado por el juez de la corte suprema del país Samuel Alito y filtrado a la opinión pública causando un gran revuelo en los diferentes se la sociedad en los Estados Unidos y el mundo.
La activista Yisbell dijo que el sábado 14 de mayo 2022 será un día histórico en la comunidad donde vamos a marchar a partir de las 2:00 pm desde Plaza Quisqueya ubicada en Broadway con Dyckman St hasta el parque Bennet Park localizado en la calle 183 esquina Fort Washington.
“Uptown para elegir. "Es mi Cuerpo mi Elección” ahí estaremos defendiendo nuestro derecho. Nos negamos a permitir que la Corte Suprema de los Estados Unidos le quite el derecho al aborto y este sábado todo debemos de estar ahí. Vamos a defender nuestros valores progresistas y los derechos de la mujer en esta protesta nacional del sábado 14 de mayo”, dijo Yisbell Marrero.
Yisbell Marrero teme por la eliminación de la ley debido a que más mujeres irían a prisión por abortar y dijo: “Los ataques a Roe v Wade establecerán un sistema legal en el que las mujeres que aborten irán a la cárcel.
Además, todas las mujeres embarazadas corren el riesgo de ser asignadas a un estatus de segunda clase que no solo las privará de sus derechos reproductivos y libertad física mediante arrestos, sino que también las despojara de su estatus como personas constitucionales plenas”.
“En 1977, el número de mujeres en prisión era cerca de un millón y en 2009 fue de 10 millones, un aumento del 938%. Hoy en día, más de 200 000 mujeres están tras las rejas, y más de un millón de mujeres están en libertad condicional.
Dos de tres de las mujeres encarceladas en los Estados Unidos tienen al menos un hijo menor de edad, y aproximadamente el 5% de las mujeres están embarazadas cuando comienzan su encarcelamiento”, agregó Marrero.
“Necesitamos escuchar las necesidades y metas reales (no idealizadas) de mujeres y niñas.
Cuentan historias de no poder asistir a la escuela, no recibir información sobre anticonceptivos, no tener acceso a establecimientos de salud para atención prenatal o abortos seguros, y ser violada”.
“La retórica debe cambiar de un discurso basado en la moralidad a un enfoque de atención médica que utilice datos empíricos. Podemos brindar la ayuda que las niñas y las mujeres necesitan tan desesperadamente para realizar su potencial humano. En última instancia, exportamos nuestros debates internos sobre Roe al costo insoportable de limitar el control de las mujeres y aquellos que se identifican como mujer sobre su vida reproductiva y las altas tasas de mortalidad materna”, finalizó diciendo Yisbell Marrero.